79 ANIVERSARIO

Una puerta de garaje abierta,
niños y anciano contando historias
llenando bolsas de polo de duro.
Una hora: las cinco de la tarde
un colegio, un furgón,
dos abuelos y dos nietos.
Una abuela... mi abuelita,
que entre dientes nos canturreaba
que entre sueños, cuentos contaba,
que nos mimaba
que nos cuidaba.
Siempre con la puerta abierta,
siempre con la sonrisa puesta,
siempre con un beso en los labios.
Mayor se hacer esa abuela mia,
y con sus palabras inventadas
pasamos la infancia.
Y aprendimos a ser honrados,
a ser siempre buenas personas,
a querer a los nuestros,
a ser mejor que los enemigos,
a sufrir y a luchar,
a no desfallecer
a trabajar hasta la vejez.
Esa abuela mía,
que prometio un día,
durar hasta los cien.
Ojalá no llegue a vivir
ni un dia de menos.

TERESA RODRIGUEZ JUAN
13 DE FEBRERO 2012
79 CUMPLEAÑOS DE MI ABUELA

LA INMUTABILIDAD DE LAS PALABRAS

Hoy en día, vivimos un fenómeno sociológico, cuanto menos curioso: los jóvenes han perdido la esencia del idioma, la belleza de sus palabras, heredadas de un castellano cervantino o gongorino, un tanto casposo, como suelen aludirlo. Las palabras se transforman, pierden letras, mutan unas por otras, ejemplos tenemos a miles y si no mirad los whatsup de vuestros hijos, o amigos o los vuestro propios y veréis lo que os digo. Si lo que queremos es ahorrar letras por decir más cosas en menos espacio y por tanto menos dinero, si lo hacemos por una cuestión de maximizar economizando, no es del todo mala la cosa. El problema radica cuando eso se convierte en hábitos a la hora de usar el papel y el boli de toda la vida. Los jóvenes tienen no solo que aprender la gramática morfológica de las palabras si no que son capaces de traducirlas al castellano post-moderno y viceversa, aunque este ultimo paso a veces se les resiste. Y nosotros pensando que son más tontos…. Pues he aquí mi teoría… son más listos que los que tradujeron al castellano moderno el Amadís de Gaula, ellos estuvieron años y años haciéndolo, nuestros jóvenes apenas necesitan una vibración de su móvil para automáticamente poner la mente traductora en movimiento. Traducen lo que leen, lo llevan a su cerebro, lo entienden se ríen, piensan en lo que responden, y lo traducen al castellano post-moderno en décimas de segundo, antes de que a los padres les de tiempo de decir ¡ay!  Si eso no es evolución…. Aun así siento que cada día se nos va una palabra… y cada día que me levanto, al poner un pie en el suelo, juego a pensar en que palabra magnifica de nuestro magnifico idioma se habrá ido por la red… “Haber”; “Que”; “Porque”; “Para”, y pienso en las palabras dentro del diccionario, como si cobraran vida temblando y hablando entre ellas (imaginaros la sociedad tan rica que tienen que tener las palabras de un diccionario si hablaran entre ellas) y haciendo entierros dignos a sus predecesoras muertas o mutiladas, acostándose cada noche con la incierta sensación de no saber si mañana estarán impresas o las habrán cambiado por alguna falta garrafal de ortografía del hoy, que será la nueva palabra del mañana. REQIEM X LS PLBRS MRTAS.

ERASE UNA VEZ.... UN CUENTO

Quiero escribirte un cuento

que así empiece:

Erase una vez un cuento.

Un cuento sencillo,

sin letras, sin palabras, sin sentido y sin razón.

Un cuento emotivo con final feliz.

Un cuento de dos amantes

que se entregan al alba del verano,

que se miran y se estremecen,

que se adoran y se quieren,

que su amor sea prohibido.

Erase una vez un cuento,

caliente y árido,

verde y rojo.

Un cuento inarrable

que las palabras susurre,

que como con vergüenza salgan de la pluma

del poeta que lo cante.

El cuento del  amor inconmensurable.

Del reto de mirarse sin morderse.

El cuento de dos amantes

que se aman por la noche

sin poder evitarse.

Erase una vez un cuento

que retorna a su tinta,

que no quiere escribirse,

que solo quiere no nacer

para no morir en un beso,

que solo quiere no existir

para no haber de morir.

Erase una vez un cuento.

Aquel que no logré escribir,

que se quedó en un erase,

aquel que no salió de mi tintero,

aquel que mi pluma no escribió,

aquel que ronda en mi cabeza

aquel que alguien algún día,

me robó.

EL JARDIN DE SHEREZADE

En el jardín de la reina mora,

corren raudos lo pájaros

oteando el suelo,

buscando migas que alguien desechó.

Alguna ardilla se coló

buscando el silencio y la armonía

que la ciudad le quita.

Las fuentes emanan 

la tarantela de su agua,

que busca insaciable apaciguar

a los que debajo se sientan.

 Sherezade, reina y señora de su jardín,

custodia y guarda las historias que escucha

y su sonrisa inacabada,

vela a la sombra del limonero,

que inalterable, deja pasar el tiempo.

Los faroles iluminan la entrada al edén,

y su luz, aterciopela los sentidos.

Alegrías, cipreses y galanes

condecoran el entorno,

donde la vida pasa,

mientras se detiene el tiempo.

RARA

RARE

Me llaman rara,

me gusta sentarme en la playa

Y ver las estrellas que me miran

Y oír el mar en calma

Y respirar la arena recién mojada

Y verme reflejada,

en el reflejo de la luna en el agua.

UNUSUAL

Me llaman singular,

me gusta sentarme a pensar

Y verme pensando,

me hace pensar, que estoy pensando,

entrando en un bucle sinfín

Y verme sentada pensando,

me hace ignorante.

CURIOUS

Me llaman curiosa,

me gusta leer,

sentarme agazapada

saboreando las tapas del libro nuevo,

olerlo antes de leerlo,

sentir como queda entre mis manos.

FUNNY

Me llaman graciosa,

me gusta ser diferente,

nadar contracorriente,

ser de los míos,

dar besos a mis amigos,

hacerles reir,

reírme mucho.

EXTRAVAGANT

Me llaman extravagante,

me gusta ser yo,

estar en mi cuerpo y en mi alma.

Me gusta ser fiel a mí misma,

lejos de bogas,

lejos de criterios estandarizados.

Mezclar en mi, vidas distintas.

Me gusta Nietzsche y Figueroa.

ODD

Me llaman extraña

Y no saben lo que dicen.

No puedo ser más cercana.

Tengo tantas cosas por saber,

tantas cosas por aprender,

tantas cosas por reir,

tantas cosas por llorar,

tantas vidas que vivir

Y una sola por morir.

Quizá sea, lo que dicen que soy:

Anómala, insólita, irregular y singular,

atípica, extraña, extravagante y curiosa

peculiar y excéntrica.....

Demasiadas cosas en un fútil cuerpo.

SOLO UN CROMOSOMA

Todos somos uno, de la misma especie, más o menos, todos los seres humanos nos parecemos. Unos más gordos, otros más delgados, unos de un color, otros de otro... pero en el fondo prácticamente no nos diferenciamos, esto que digo, parece un tópico, pero no lo es, grandes filósofos de todas las culturas y siglos se han secado el cerebro para averiguar qué es lo que nos incita a ser como somos, que nos motiva, que nos excita la serotonina... y casi ninguno ha llegado a una conclusión clara, ya que muchas veces las conclusiones de uno son de plano diferentes a la de otros, así que, ¿a cuál creemos? En realidad da igual, porque podremos decir que cada filósofo, según tu propia ideología, tenían razón, pero ninguno la tenía en absoluto, nos creemos iguales, y no lo somos, solo necesitamos sentirnos aceptados, sentirnos grupo y multitud, a la vez que pretendemos mantenernos en nuestra propia identidad y reivindicar nuestra propia independencia de ideas y estereotipos. Todos pensamos que somos únicos cuando en realidad hay millones de personas en el mundo haciendo y pensando lo mismo que nosotros en el mismo minuto que nosotros. Entonces ¿que nos diferencia? ¿Que nos hace ser diferentes al resto de especies? Cuál es el exactamente el único cromosoma que nos diferencia de la mosca? Algunos dirán que el lenguaje, el raciocinio, la capacidad de inventar, la ambición por ser distintos  y no creernos una raza de animales, nos motiva a evolucionar, y la propia evolución nos hace evolucionar más, pero yo creo que nos diferencian dos cosas, que además están bastante vinculadas aunque la vinculación no se vea a simple vista: El amor, y las religiones. No existen moscas ateas, ni moscas que se enamoren perdidamente. Las moscas sobreviven y para sobrevivir necesitan emparejarse, tampoco tienen memoria, entonces cada vez que pasa una mosca hembra por delante de una macho, no saben si esa será su pareja... y... de perdidos al rio.... A nosotros nos pierde el sexo opuesto y la eterna discusión sobre Dios. Evolucionamos en torno a esas dos cuestiones. Los inventores más renombrados, crearon sus inventos, por dos cuestiones; una... para evitar limpiar en casa, con la excusa de estar pensando en algo que revolucionará al mundo, y por la tonta idea de que cuando lo inventaran tendrían a las mujeres a sus pies, y digo inventores, porque no han trascendido a la historia muchas mujeres inventoras... ¿porque? Porque ellas estaban más ocupadas limpiando las casas de sus maridos inventores, y porque no necesitaban tener a sus pies a muchos hombres, al revés... a veces necesitaban mata moscas, confirmándose la teoría de que solo nos diferencia del insecto un cromosoma... El amor, ese guión del cerebro que dirige el corazón y produce... dolores de cabeza. Alguien cree que las moscas sufren por amor, lloran porque me han dejado, sonríe porque me ha mirado, y hablan con sus amigas de las alas tan respingonas que tiene aquella posada en mi pie???... no... Se confirma la teoría, que tener un cromosoma más no es sinónimo de ser más listo. Ellas no sufren por amor... pero tampoco lo disfrutan. El amor, puede ser lo más bello que te pase en toda tu vida, lo que más recordaras lo que pasa de padres a hijos y a nietos y biznietos, todos tenemos historias maravillosas de antepasados que se casaron con quien no debían, o de traiciones amatorias, o de trágicos momentos amorosos... todos... Al final trasciende eso, te identifican por eso, te hacen como persona. Todas tus vivencias amorosas las recordaras mejor que todas tus celebraciones de cumpleaños. Pero como es lo más bello, también puede ser lo más penoso... siempre, los polos opuestos se atraen, cuánto más hermoso es, más patética será la caída. En el amor los extremos se radicalizan, como en casi todo. Las moscas no disfrutan del amor, ni lo sufren. La pregunta es: ¿serán felices? La felicidad absoluta sólo se consigue cuando sabes lo que es la máxima decepción... mientras tanto vivirás sin saber que estás viviendo, sin saber que estas disfrutando, sin apreciar los pequeños detalles: las rosas a las 8 de la mañana, los besos a las 3, los despertares, las vigilias y las llamadas para decir simplemente te quiero.

PD.- El tema de la religión en las moscas lo abordaré el día que me encuentre a alguna amenazando a otras con dinamita en las alas, reclamando que el trozo de pastel de la derecha es suyo…

SIERRA NEVADA

Las montañas de los picos aún nevados,

reposan sobre las aguas

de sus propios ríos.

Besa con sus peñones

las orillas de sus lagos.

Absorbe con sus raíces,

los recuerdos del invierno.

Solo la mano monstruosa del hombre,

rompe el agua que fluye al mar,

quita vida cuando pasa,

ahorca chopos.

Pone hoteles en medio del mar

y piscifactorías en las montañas.

Esa montaña nevada se queja

y en su desesperación... escupe piedras,

no reproduce ecos,

se avergüenza de sus picos nevados

y los deshiela.

En su tristeza llora, y diluvia.

En su desasosiego... ya no nieva.

ESTEPA

En el campo castellano,
crecen trigos y cebadas.
Al amanecer fresco,
salen hombres a segarlas.
Vuelven a la luz anaranjada,
contando historias heredadas.
Ya de noche estridulan grillos
esperando una nueva madrugada.
Desde el primer olivo
hasta el último almendro,
se ven manos ajadas,
manos arrugadas
que se niegan a perder
lo que sus padres labraron,
que se niegan a perder
lo que sus hijos olvidaron.
En la quietud del campo arado
se ven pájaros ahuyentados;
un almendro en flor tiritando;
una laguna triste sin patos;
un molino viejo con sus aspas lamentadas;
dos ardillas buscando casa;
un viejo a contraluz....
soltando lágrimas.